Hace ya tiempo que el término Showroom se escucha con fuerza en el mundo comercial en general, destacando sobre todo en aquellos mundos dedicados a la moda textil, las catas gastronómicas y a la electrónica.
Realmente podemos definir un Showroom como un espacio dedicado a dar visibilidad a uno o varios productos, que no tienen por qué pertenecer a la misma marca, pero sí suelen tener una relación. Un ejemplo de ello son aquellos que se organizan para una nueva temporada de moda, donde podemos encontrar ropa, calzado, accesorios de moda…
Este tipo de eventos pueden ser fijos en un local creado y preparado para ello, o pueden formar parte de una feria de muestras. Esta forma de presentar productos y servicios también se puede conocer como el modelo de negocio Pop-up Store, dónde diversas marcas coexisten para mostrar a potenciales clientes cuales son sus novedades o productos estrella de la temporada.
En conclusión, crear un espacio donde lo que se ofrece es el punto clave, creando un entorno agradable y propicio para que los clientes puedan ejercer su voluntad de compra de un modo sencillo y más atractivo.
¿Cuáles son las ventajas de un Showroom?
Con la definición de esta forma de “exposición” de productos ya nos debe quedar bastante claro cuales son los grandes beneficios de este modelo de venta; sin embargo, podemos seguir remarcando algunos aspectos positivos que hacen destacar el showroom por encima de cualquier tipo de tienda o negocio tradicional.
El marketing ha conseguido grandes logros en el mundo de las ventas y la comercialización de productos, acercando a las marcas a sus clientes objetivo, buscando así una mejor relación entre ambos.
Este proceso ha sacado a la luz los diversos aspectos que afectan a un comprador en su proceso de decisión, por lo que son aplicables para mejorar los beneficios y ventas del negocio.
Crear un ambiente sosegado, tranquilo y relajado, hace que las personas puedan ver, pensar y decidir de un mejor modo qué es lo que van a adquirir, facilitando incluso que quieran obtener más prendas de las que habían pensado con anterioridad.
Crear un espacio con unos olores determinados, unos colores que evoquen determinados sentimientos hacia lo que vemos… y un sin fin de aspectos que van a mejorar la experiencia de compra del consumidor.
Y tú, ¿aún no has probado el modelo de Showroom?
¡Contacta con nosotras!